Esta conocidísima excursión empieza en el monasterio de
LLuc, pero decidimos acortarla un poquito empezando desde la urbanización de
Son Macip, desde la carretera se ven los letreros del GR221 que nos señalizan
todo el trayecto e iniciamos la subida por un ancho camino y en dirección a ses
Voltes d’en Galileu.
Durante todo este recorrido los 30cm de nieve ya han sido
pisados y más o menos el avance es fácil y rápido, pero una vez arriba de ses voltes
y justo donde se encuentra la “casa de neu” el espesor de la nieve alcanza los
50cm y el camino está virgen, somos los primeros en intentar pasar por un
sendero que no se ve, solo se intuye.
A medida que avanzamos observamos que los
carritxs están cubiertos completamente de nieve y solo asoman las puntitas más
altas, eso nos da una pista de la cantidad de nieve acumulada, nuestros pasos que
parecen los de un elefante, nos hacen hundir más de un metro en la nieve. Hemos
salido del sendero para ir directamente por la cresta de la montaña, pero
nuestro avance con nieve hasta la cintura es muy lento, nos vamos turnado para ir
delante y abrir el camino, tenemos la cima justo delante y ahora solo nos queda
subir los últimos metros entre nieve y roca helada.
Desde lo alto del Puig d’en
Galileu 1.181m tenemos unas vistas fantásticas del Puig Major, el Tomir, el Massanella
y el Coll del Telègraf, incluso podemos ver a los excursionistas que caminan
por las blancas montañas.
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